lunes, 27 de junio de 2016



CRÓNICA TRIUNFAL
Por Azulenca


Decían los viejos de Grecia que la locura es un don de los dioses; si eso es así, en España vivimos en el Olimpo. Una locura la de ayer 26-J, contra todo pronóstico el P.P sube y Podemos se estanca. Está claro que los españoles han dicho en las urnas: los experimentos con gaseosa. Mariano, el Presidente en Funciones pasivo-reflejo ha ganado más votos en estas elecciones que en las pasadas. Sin duda, algo hizo Mariano en la noche de San Juan, noche de hechizos y magias. A Mariano nadie lo quiere, no lo quieren sus adversarios para pactar, no lo quieren en su partido y sin embargo el pueblo español, la ciudadanía, le ha dado más votos en las urnas. La pasividad de Mariano, ese no hacer, ese Mariano estático e inamovible, ese Mariano plasma, le ha dado la victoria en las urnas. Ni la corrupción, ni los aforrados, ni el escándalo de Interior comparable a Anacleto Agente Secreto... han podido con Mariano Presidente en Funciones. El pueblo ha hablado y ha dicho: Mariano. Y es lo que hay, aunque sea inexplicable y las encuestas sigan sin dar una. Por cierto, el tema de las estas empresas dedicadas a las estadísticas electorales, yo creo que deberían devolver el dinero a quienes les encargaron este trabajo: no han dado una en el clavo, es más, ha salido todo lo contrario.
         En líneas generales la campaña electoral ha sido una campaña a base de camisa blanca y no decir nada, es más, ha hecho más el Brexit por Mariano que todos los mítines y actos de partido juntos. Me encantó el fin de fiesta de los chicos de la gaviota, del albatros, un desmelene total. Fiona de la cienaguita, Sor Aya, a lo loco y todos bailando y berreando. ¿No es encantador un cierre de campaña así? Y ¿Miss Alcarria? La Cospedal. ¿Se han dado cuenta? Lola se ha retocado la cara y despista con el corte de pelo, pero no, se ha rebotoxterizado el rostro: apuntalando arrugas y borrando ojeras. ¿Y la marcha del deportista Mariano?, se me cayó el alma a los pies cuando ví la carrera de Mariano. Rajoy es pasivo hasta haciendo deporte, la pasividad es el arma letal de Mariano, se podría decir que es un Ghandi a la gallega.
         ¿Y el joven Garzón? Pobre chico; él que se las prometía tan felices con su colega con coleta Podemos; él, que lideraba el cambio, el progreso y una grande y libre... Pues eso... Los comunistas serios de su partido no han tragado con ese pacto a base de cañas con su amigo “coleta larga” compartido en las redes sociales.
         Los guapos, simpáticos y regeneracionistas se han quedado ahí, se han perdido un poco por el camino… Lo de estos chicos de Ciudadanos es toda una declaración de intenciones y poco más, bueno, tarde o temprano tendrán su pesebre que es a lo que van. Y Pedro del PSOE camisa blanca de mi esperanza, pues no le ha ido del todo mal, se ha librado del sorpasso y eso ya es un éxito, una victoria pírrica, creo, a ver qué pasa en el futuro. Veo a Margarita Robles repartiendo la hoja parroquial en el Congreso y a Borrell vendiendo iguales. 
          Por otra parte convendría en el Congreso que tuvieran un "desfibrilador mental", para poner a sus señorías las ideas en su sitio, porque desde luego coherencia cero, responsabilidad, tolerancia cero, creatividad menos uno.
         Ahora viene la segunda parte, la más interesante: los pactos. Esperemos que las pandillas del Congreso se tomen en serio la formación de Gobierno y dejen de comportarse como si el Congreso fuese el Interpeñas. Yo que esperaba ver una entrada triunfal en el Congreso del antiguo JEMAD, José Julio, con la camiseta de Paz, Amor y Libertad y un casco Marte en la cabeza; pues no va a poder ser, este hombre es gafe, además de ser militar antimilitarista: no ha conseguido escaño por Almería. ¿Nos consolaremos con otra imagen del bebé de Carolina? ¿Lo llevará con el cubito de playa y gorrita visera? Estoy segura de que estos se van poner todos de acuerdo para pactar gobierno a la primera de cambio e irse de vacaciones: el veraneo es sagrado en este país.  
         Y yo creo que habrá gobierno, que no habrá unas terceras elecciones allá para el solsticio de invierno, espero. Tendremos un gobierno coctel aderezado con el plátano de Canarias y algunos ingredientes regionales, no sé si con salsa romesco. A Mariano no lo quiere nadie, pero con poder… las cosas cambian. La tragedia se ha vivido hoy: La Roja a casa.


martes, 14 de junio de 2016



En la trasnochada
María Jesús Mayoral Roche


En Villamayor de Gállego, 14 de junio 2016

España camisa blanca de mi esperanza
     

         A los políticos les han aconsejado el uso de la camisa blanca, parece ser. Pedro la luce en todos sus mitines y Pablo se la puso ayer para ir al plató de televisión, también suele comparecer con ella en puntuales ocasiones. El color blanco es el color de la pureza, de la inocencia, de la paz, de la honradez, de la sinceridad... El blanco en la Iglesia es el color de la Gloria, de la Resurección.
         A propósito del blanco, me vienen a la memoria ciertas conversaciones en el Centro Penitenciario de Zuera cuando en vísperas de juicios, la mayor parte de los presos se declaraban inocentes o se quejaban de que el delito no era para una condena tan excesiva como la que les había caído. A algunos les habían cogido con kilos de droga y por supuesto la condena era proporcional  al peso. Cuando se quejaban, yo les decía: Sal a la calle y pregúntale a la madre de alguno de los que les vendiste droga, a ver qué te dice de tu condena. Bajaban la cabeza. La semana precedente al juicio un preso siempre se pone nervioso, se altera y se declara inocente a medias o del todo. Yo les recomendaba que si realmente estaban convencidos de lo que decían, de su inocencia, que se pusieran una camisa blanca para ir al juicio, que el blanco siempre ayuda, que al juez había que pedirle misercordia y que el blanco refuerza la verdad. Les decía esto y lo decía porque estoy convencida de ello. El blanco es el color recomendado para entrevistas de trabajo e interrogatorios, pero hay que saberlo usar.
         En mi opinión, es indispensable tener una camisa blanco nuclear en el armario. A mí, particulamente, no me favorece este color; pero no dudo en enfudarme una camisa blanca cuando sé que me van a someter a un minucioso interrogatorio y que me van a mirar con lupa. El blanco es un foco de luz que puede perfectamente servir de escudo, además de dar confianza al interlocutor; pero el blanco te puede dejar también en fuera de juego cuando no hay seguridad en quien lo viste, te deja al descubierto cuando no hay sinceridad y desde luego es un color que no casa con la soberbia. Digamos que el color blanco es un un blanco perfecto, tanto para bien como para mal: es un color que refuerza las virtudes, pero descubre los defectos. Debo añadir que el blanco puede ser ofensivo para un interlocutor oscuro, en cuyo caso aflorará la inseguridad del mismo.
         Hay que incidir en que una cosa es el uso y otra el abuso. Una camisa blanca para todo... es reducirla a un estilismo de prensa rosa. Ahora viene la parte frívola de la camisa blanca. Dicen... que la prueba de fuego de la elegancia son los jeans y la camisa blanca, que los verdaderamente elegantes no necesitan más. Tal es así, que en sus posados y reportajes, la revista HOLA viste a los aristrocrátas y ricos de familia con tejanos y camisas, camisetas o jerseys blancos.
         Pero volviendo a la política. En medio de la corrupción el blanco inmaculado te exculpa; en medio de la zafiedad, el blanco te limpia. Pero en cuestión de sinceridad... El hábito no hace al monje. Y es que los políticos prometen y luego no cumplen. Pedro del PSOE, ha decidido hacer de su camisa una prenda mitinera. Pablo de Podemos ha decidido hacer de la camisa blanca una bandera, así como de la paz. No debemos olvidar que el blanco también es el color de la rendición.
         No puedo evitar que aflore mi parte Azulenca en este tema, porque la camisa blanca debe ser blanca, nuclear, si me apuran. Y tanto Pedro como Pablo no la llevan de un blanco inmaculado, creo que deberían optar por el Vanish, es decir, por el blanqueador. Y no me vale que me reciten la gama de blancos, que si blanco hielo, blanco roto, blanco plata, blanco perla... para exculparse de no llevar una camisa blanca en perfecto estado de revista.
         Y como dice el poema de Blas de Otero, hecho canción: España camisa blanca de mi esperanza... Que poco confío en la clase política de este país.