lunes, 9 de diciembre de 2013

Miércoles de Cine
María Jesús Mayoral Roche
 


 
Título Original: La grande bellezza
Género: Comedia dramática
Director: Paolo Sorrentino
Actores: Carlo Buccirosso, Carlo Verdone, Franco Graziosi, Galatea Ranzi, Iaia Forte, Pamela Villoresi, Sabrina Ferilli y Toni Servillo.
Nacionalidad: Italia
Duración: 142min.
Guionista: Paolo Sorrentino.
Distribuidora: Wanda Visión.
Productora: Indigo Film, Medusa Film.
Música: Lele Marchitelli.
Fotografía: Luca Bigazz

     La Gran Belleza. La Gran belleza o la actualización de la Dolce Vita. Una película que no está destinada al gran público, añadir de paso que algunas críticas han sido demoledoras. La Gran Belleza nos muestra una Roma bellísima, como siempre, y algo más: rincones, esquinas, tomas cenitales, noches de una Roma desierta salpicada de luces, perfiles monumentales y sobre todo gente, el factor humano de esa Roma que parece no cambiar. Intelectuales decadentes, burgueses aburridos, aristócratas arruinados, monjas momificadas en vida, vividores cansados de vivir, talentos que no llegan a despuntar… La Gran Belleza es el retrato de una ciudad clásica y bella hasta la extenuación, que hace rendirse al turista diletante. Los moradores de clase alta disfrutan de esta Roma de noche, con todos los vicios que conlleva; los intelectuales que se suman a este estilo de vivir están cansados de la ociosidad en la que se han instalado los ricos. Ricos que se divierten con ese arte tan simple como estéril, que se encantan escuchando frases grandilocuentes sin sentido y hablando de banalidades.
 
     La Gran Belleza es un peliculón, con tintes estéticos de Fellini y Viconti, en el que no pasa nada, tan sólo la noche y sus moradores. Todo comienza cuando Jep Gambardella, el protagonista, cumple sesenta y cinco años y decide salir del grupo para mostrarnos el deterioro de esa gente en pleno crepúsculo  que sigue alimentando su ego, su vacío. Y todo este retrato está salpimentado con el cinismo de un escritor que consiguió el éxito con una novela de juventud y que sigue viviendo de las rentas de aquella genialidad. Las palabras finales de la película en boca del protagonista lo dicen todo. Quizá no sea una película para el gran público porque es necesario saber para comprenderla. Pondré un ejemplo. Hay que conocer el título de la música de fondo para caer en la gracia de la escena que sigue a continuación. De paso decir que la música no pasa desapercibida, entra a punto y en mi opinión eleva el relato del protagonista.
     Algunos seguidores de este blog me han preguntado si he dejado de ir al cine. No, no he dejado de ir al cine; sin embargo he abandonado este espacio por la sencilla razón de que no tiene demasiados lectores. En esta ocasión he querido hacer una excepción porque esta película se lo merece. 

9 comentarios:

  1. Interesante.
    Todo en ella me apetece , pero la decadencia en las costumbres siempre me deprime.
    Me alegro leer de nuevo las criticas de cine.

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  2. Roma es ja ciudad más bella del mundo. La decadencia forma parte de ella. Y es parte de su encanto. Esa monumentalidad no puede sostenerse completamente y de ahí la decadencia nostálgica. Es una ciudad excesiva en todos los sentidos y sin embargo conserva mucho encanto en muchos rincones. Quien no haya ido debe hacerlo.
    Vladimira

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  3. Una observación más: es tan monumental que la globalización no puede con ella. Puedes llenar su centro de franquicias mundiales y no logran crear esa sensación globalizante. Y eso es magia.
    Vladimira

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  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  5. Roma incluso desconchada es estéticamente perfecta. En cuanto a que Roma sea la ciudad más bonita del mundo, eso puede ser discutido y discutible. No digo que no, pero para gustos se hicieron los colores. Lo que pasa que para las clásicas como tú y yo, Vladimira, digamos que Roma es lo más...

    Saludos.

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  6. me gusto ,pero eche de menos , que fuera mas larga, en tan poco tiempo,no llegas a penetrar, totalmente, dentro de la pelicula , de todos modos lo que vi me gusto ¡

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  7. Completamente deacuerdo, es una película estupenda. Pero Victoria ¿de verdad querías que fuera más larga? Dura 142 minutos, casi dos horas y media, yo creo que debería durar algo menos para que se acercase más al gran público.
    Os dejo una crítica en La Imagen Portátil http://laimagenportatil.blogspot.com.es/

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  8. A mí me encantó. Me parece una obra maestra.

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