El FUTURO DE MARAVILLAS
Desde que están los del PP en el gobierno los
funcionarios trabajamos más, cobramos menos y tenemos menos días de vacaciones.
La mayoría de la gente se alegra de estas medidas, de todos es sabido que los
funcionarios tenemos mala prensa. Pero quien manda, manda, y la orden es dar
caza y captura al contribuyente, al humilde ciudadano de a pie. Y luego dirá el
contribuyente que los funcionarios no trabajamos... Pues estamos trabajando más
que nunca inspeccionando al contribuyente para que se siga alegrando de que nos
hagan trabajar más y mejor, todo esto es por obra y mandato de Montoro. Si hay
crisis y encima no hay dinero; la solución son las multas, las inspecciones, la
subida de impuestos y los recortes. ¡Más y más trabajo para los funcionarios!
Me avergüenzo pero debo confesar, que en estos dos últimos años se han desatado
mis instintos más bajos en cuestiones de trabajo, por eso me viene a la memoria
la canción de La Funcionaria Asesina que cantaba Alaska, allá por los años 80.
¡Ganas dan de coger la motosierra…! De todas formas estamos a veinte de
noviembre, ¡ya sólo le quedan a Montoro dos años como Ministro de impuestos y
perseguidor al contribuyente! Porque hasta ahora no ha hecho otra cosa en su
mandato. Bueno, también decir tontadas en lugar de dar explicaciones coherentes
y racanear.
Pero lo que más nos preocupa a los funcionarios es
nuestro futuro, la jubilación, y me parece que lo tenemos crudo; creemos que a
los que nos quedan diez años hasta llegar al día de liberación, ese bendito día
en que nos corten las cadenas que nos atan a la Administración… Pues en esas estamos,
pensando y casi estamos convencidos de
que ese día no va a llegar nunca, porque no habrá dinero para pagarnos la pensión
y nos tendrán trabajando hasta que se nos caigan los dientes de viejos.
Previendo el futuro que nos espera, nos estamos haciendo
a la idea del nuevo mobiliario de oficina y de los accesorios que deberán ir
preparando en el Ministerio de cara a tener funcionarios septuagenarios y
octogenarios; si la vida y la salud lo permiten, claro. Lo cierto es que nos
vemos todos, en breve, dándole al ordenador con un happylegs en los petetes y
las piernas tapadas con una manta de cuadros. Hemos propuesto a los jefes, que
vayan preparando una rampa con silla para subir las escaleras de la entrada. Muy
importante y a tener en cuenta, esto ya como medidas de prevención de cara
evitar operaciones quirúrgicas, necesitaremos unas buenas lupas de aumento y
pantallas gigantes de ordenador con letras extra-grandes. Y es que al paso que
vamos tampoco habrá dinero para pagar este tipo de intervenciones oculares, así
que lo mejor será que vayan preparando material óptico en condiciones.
Quiero aprovechar la ocasión de este espacio, que el
universo Google me brinda, para dar una idea a toda esta gente emprendedora. Es
necesario que vayan pergeñando y preparando una patente para el invento de un
ratón para artríticos, pues al paso que vamos los funcionarios padeceremos esa
enfermedad profesional; también sería interesante un ratón anti-temblores. A
las personas mayores les suelen temblar las manos. El panorama de cara a la
vejez de los funcionarios será de lo más ortopédico: una pantalla gigante de
ordenador, un ratón para artríticos y dándole a los petetes con un happylegs. Todo
esto será así, suponiendo que lleguemos por nuestro propio pie, porque de lo
contrario que vayan preparando sillas de ruedas y ensanchando los espacios para
la movilidad. Otros irán con bastón, esto puede ser un arma peligrosa en la vejez,
sobre todo en casos conflictivos. ¡Menudo cuadro se le presenta al
contribuyente cuando se asome a la ventanilla! Más que estar en la
Administración, les parecerá visitar un pabellón de reposo. Se me olvidaba lo
mejor, ¡qué fallo! El sonotone. ¡Qué bella estampa! Una cuadrilla de viejos
atendiendo al contribuyente a gritos. ¡Qué! ¡Eh! ¡Ah…!