lunes, 17 de febrero de 2014



VISIONES…

 
¡No será verdad, no nos caerá esa breva! Cataluña quiere ser independiente y yo estaría encantado de verlo. Me llegan comunicados y direcciones de páginas para firmar en contra del sueño catalanista. No, no lo haré; si acaso firmaré para que les concedan su ansiada independencia. Una vez que Cataluña se convierta en estado independiente, se acabó la amenaza del trasvase del Ebro. Lo estoy viendo, ¡por fin! Aragón consigue de una vez La Travesía Central con Francia, por fin hermanados con Pau-Béarn y Tarbes-Hautes Pyrénees. Nuestro sueño hecho realidad. Estoy convencido que sin los catalanes como vecinos a los aragoneses nos irá mejor. Y no sólo eso, lo estoy viendo: Aeropuerto Internacional de Zaragoza. Se acabó desplazarse a Barcelona para coger un avión. Con la Plataforma Logística aquí y sin los catalanes allá, nuestra Plataforma incrementará sus movimientos.
Dicen que los vinos del Priorato son muy buenos, mejor para ellos; si son tan buenos que se los queden. La butifarra y el fuet también. Desde que el sueño independentista catalán se ha desatado, el cava aragonés está vendiendo toda su producción. ¿No es maravilloso? Y puestos ya, como dice Azulenca, que contraten a la Sáenz de Santamaría y a la Cospedal como burbujas de Freixenet, da igual si las ponen de pompas del cava; total harán el mismo papel, es decir, nada. El señor Lara de Planeta dice que si la independencia sigue adelante tendrá que irse con sus empresas a otra parte; pero esto lo dice con la boca pequeña. Más ahora que gracias a la política matrimonial se codea con lo más granado del nacionalismo catalán. Todas las empresas catalanas que se queden allí, será lo mejor para todos. A mí no me gusta el perfil del emprendedor catalán, porque esta especie es depredadora.
Dirán que soy antiespañol razonando de esta manera. Pues no, no lo soy; pero viendo que nuestro gobierno no hace nada por detener ese movimiento catalanista independiente y viendo cómo actúa la clase política en general, qué más da lo que yo piense. Si quien tiene que hacer por remediar los males no lo hace; si ellos no defienden la unidad de España, qué podemos hacer los mortales de a pie. Y bueno a río revuelto ganancia de pescadores. Hay una sola pega: los cientos de aragoneses que tienen apartamento en Salou. A estos pobres el día que se declare Cataluña estado independiente, no quiero ni pensar el impuesto que les van a clavar. Algunos están poniendo ya a la venta sus apartamentos.
Pero no, no, nada de esto pasará. Seguiremos soportando a los catalanes como vecinos, seguiremos los aragoneses con la Espada de Damocles del trasvase, seguirán sin devolvernos los bienes de La Franja, tendremos que ir a Barcelona a coger el avión y la frontera con Francia seguirá como siempre. Lo mío sólo eran visiones…

3 comentarios:

  1. Y con la independencia, el tema de los calçots ¿cómo quedará? Porque si hay que pagar un impuesto por tomarlos, habra que inventar el porrete aragonés.

    PACA PALLÁ

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  2. Estos discursos nacionalistas separatistas me recuerdan a las típicas pataletas de los niños de papa ...inútiles por si mismos, consentidos deseando todas las tonterias ..... pero sabiendo que nunca les va a faltar la nevera llena de papa y mama !! está claro, para cortar las reiteradas malas actitudes y que estas no se apoderen a la razón, es preciso siempre un cachete a tiempo ..... si ya lo decía mi abuelita !! CBdeMU

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